Los bosques necesitan ser cuidados para no desaparecer
23 de marzo de 2021 Gestión Forestal Sostenible
- Un tercio de la superficie terrestre está cubierta por masas forestales que juegan un papel fundamental en la vida del planeta y cuyas amenazas y beneficios son desconocidos por gran parte de la población
- En España existen auténticas joyas naturales como los que se ubican en la provincia de Soria y que gracias a una gestión adecuada se consolidan como grandes escudos naturales frente al cambio climático
La madera es uno de los instrumentos naturales más eficientes para secuestrar carbono, de hecho, se almacena en su estructura incluso después que los árboles se hayan talado. Esa madera proviene de nuestros bosques que son poderosos escudos naturales frente a amenazas como el cambio climático siempre y cuando aprendamos a cuidarlos. Porque cuidarlos y gestionarlos es la clave ya que en zonas pobladas por el ser humano, si los abandonamos se degradan y desaparecen. Lejos de la idea más extendida, los bosques requieren de una gestión específica en la que el ser humano debe jugar el papel que en zonas despobladas desarrollarían las grandes manadas de herbívoros.
Sabemos que replantar es una acción importante para la naturaleza, para los bosques y la biodiversidad de nuestro planeta, pero olvidamos que es igual, o más importante, proteger con medidas específicas los árboles que ya tenemos para hacerlos fuertes y evitar la deforestación. Y la herramienta más eficaz para conseguirlo es la gestión. Además, nos ayuda, a evitar incendios, reducir el riesgo de plagas y enfermedades, fomentar las especies mejor adaptadas y generar recursos como madera, hongos, miel o resina, incluso, parajes para nuestro bienestar.
Porque pese a los increíbles beneficios ecológicos, económicos y sociales que brindan los bosques, la desforestación continúa a un ritmo sin precedentes. Y su existencia es vital, para, por ejemplo, regular el clima, mantener las cuencas de los ríos con agua limpia o limpiar el aire que respiramos.
El Día Internacional de los Bosques, celebrado el pasado 21 de marzo, ha servido para poner el foco en la necesidad de gestionar los bosques. Al final, un tercio de la superficie terrestre está cubierta por estos ecosistemas. En España, por ejemplo, existen auténticas joyas naturales como los que se ubican en la provincia de Soria y que se consolidan como grandes escudos naturales frente al cambio climático.
El proyecto LIFE Soria Forest Adapt, trabaja en esta línea. Es una apuesta europea que se desarrolla en los montes sorianos y que pretende aumentar la resiliencia de estos ecosistemas frente al cambio climático mediante la inclusión de medidas adaptativas en los planes de ordenación forestal públicos y privados. Porque “es necesario integrar ya en las políticas de gestión medidas de adaptación al cambio climático que respondan a proyecciones de lo que va a pasar para prevenir, para adelantarnos a los impactos”, en palabras del coordinador del proyecto Daniel Hernández Torres, técnico de Fundación Global Nature.
¿Para qué sirven los bosques?
Con el objetivo de sensibilizar sobre la importancia de gestionar los bosques para su existencia, desde el proyecto LIFE Soria ForestAdapt se ha creado un cuestionario que se moverá por redes sociales bajo el título “¿Para qué sirven los bosques?” y que puede seguirse bajo los hashtags #LIFEForestAdapt y #SoriaEscudoNatural
El proyecto LIFE Soria ForestAdapt tiene un presupuesto total de 1,5 millones de euros y un período de ejecución de cuatro años. Además, cuenta con el apoyo del instrumento financiero LIFE de la Unión Europea y del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través de la Fundación Biodiversidad. Fundación Global Nature es resonsable de la coordinación del proyecto en colaboración con la Fundación Centro de Servicios y Promoción Forestal y de su Industria de Castilla y León (Cesefor), la Fundación Privada Empresa y Clima (FEC), el Forest Stewardship Council en España (FSC España), la Asociación para la Certificación Española Forestal (PEFC España), a Universidad de Valladolid (UVa) y la Fundación General de la Universidad de Valladolid (FUNGE)